SAN JUAN de la PEÑA

Jacetania
Aragón


 





Cercano a los valles de Echo y Ansó, el monasterio de San Juan de la Peña fue escogido por Sancho III el Mayor para experimentar la reforma cluniacense antes de aplicarla a otros monasterios.

El condado de Aragón debió de surgir con influencia Carolingia alrededor del monasterio de Siresa en el siglo IX. En el año 920, el conde de Aragón Galindo II Aznárez conquistó las tierras al sur del río Aragón llegando hasta la sierra de San Juan de la Peña, no lejos de Jaca, donde fundó un monasterio dedicado a San Julián y Santa Basilisa. Este era el lugar habitado por monjes eremitas, posiblemente desde principios del siglo VIII.

Sancho el Mayor creó el monasterio de San Juan de la Peña sobre el monasterio “hispánico” del conde Galindo.

Fue el monasterio el centro religioso, político y económico del condado y del reino de Aragón en el siglo XI.







iglesia baja
siglo X





escudo del conde de Aranda
 en arco jaqués

panteón de nobles aragoneses y navarros

 

La predilección que los reyes aragoneses dispensaron hacia San Juan de la Peña se evidencia no sólo en las donaciones sino también en la elección del lugar como panteón de la dinastía que se inicia con Ramiro I, hijo ilegítimo del rey navarro Sancho III "el Mayor". El primer enterramiento indubitado es el de Ramiro I - primer rey de Aragón - y su mujer Ermesinda. Su sucesores, también "reyes de los pamploneses", fueron enterrados en este lugar: Sancho Ramírez y su hijo Pedro I, no así su otro hijo Alfonso I "el Batallador" (+ 1134) que fue enterrado en Montearagón y trasladado en 1843 a la iglesia de San Pedro "el Viejo" en Huesca.

 

panteón real construido por Carlos III
siglo XVIII

otros enterramientos de los Reyes de Navarra en:

esculturas yacentes en el museo de Louvre (París):